La presidenta de Perú Dina Boluarte sigue en el ojo de la tormenta luego del ingreso masivo de policías a la Universidad San Marcos de Lima. Se denuncia la falta de fiscales y hay quejas se trata como delincuentes a varios manifestantes.

El ministro de Interior de Perú dijo que el operativo en la universidad estaba justificado porque "había flagrancia y estado de emergencia".

Doscientos manifestantes fueron detenidos y se lloran decenas de muertos. En tanto, hubo 109 cortes de rutas en casi 40 provincias. Lo más grave ocurrió en Puno, donde se quemaron una comisaría, la fiscalía y al menos cuatro sucursales bancarias.

La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos llamó a garantizar la legalidad de las intervenciones mientras continúan los rescates de 400 turistas varados en Machu Picchu.