

El Índice de Confianza en el Gobierno (ICG) que elabora la Universidad Torcuato Di Tella registró en septiembre un nuevo derrumbe y alcanzó su nivel más bajo desde el inicio del mandato de Javier Milei. El indicador quedó en 1,94 puntos, por primera vez por debajo de la barrera de los 2, tras una caída mensual del 8,2% y un retroceso interanual del 10%.
El informe detalló descensos en todos los componentes evaluados:
Evaluación general del Gobierno: 1,57 puntos (-11,5%)
Eficiencia en el gasto público: 1,87 puntos (-11,2%)
Preocupación por el interés general: 1,47 puntos (-15,1%)
Honestidad de los funcionarios: 2,44 puntos (-3,7%)
Capacidad para resolver los problemas del país: 2,38 puntos (-3,1%)
Se trata del segundo retroceso fuerte consecutivo tras la baja de agosto (-13,6%). En dos meses, el índice pasó de 2,45 a 1,94 puntos, lo que representa una pérdida superior al 20% y muestra un claro deterioro en la percepción social.
La encuesta se realizó entre el 5 y el 15 de septiembre, en un contexto político y económico convulsionado: la derrota electoral en la provincia de Buenos Aires, denuncias de corrupción en la Agencia Nacional de Discapacidad, tensiones cambiarias, endurecimiento del ajuste fiscal y nuevas críticas por la política de retenciones al agro.
Impacto según segmentos
El informe reveló diferencias en el comportamiento de la confianza:
Retrocedió más entre los hombres (2,12 puntos, -12,4%) que entre las mujeres (1,76, -2,2%).
Fue más fuerte la caída en los mayores de 50 años (-12,5%) y en quienes tienen entre 30 y 49 (-10,1%).
En contraste, los jóvenes de 18 a 29 años fueron la única franja con una suba significativa (+17,1%, hasta 2,47 puntos).
Geográficamente, cayó en el interior del país (-10,9%), se mantuvo relativamente estable en el conurbano bonaerense (-3,6%) y mostró un leve repunte en la Ciudad de Buenos Aires (+1,1%).
En términos educativos, retrocedió con fuerza entre quienes alcanzaron estudios terciarios o universitarios (-13,9%), mientras que casi no varió entre quienes completaron secundaria (-1,5%) y subió entre los de menor instrucción (+2,7%).
Pese al récord negativo, el nivel actual todavía se encuentra 23,1% por encima del registrado en septiembre de 2021 durante el gobierno de Alberto Fernández, aunque está un 31,9% por debajo del alcanzado en septiembre de 2017 bajo Mauricio Macri.
El indicador refleja un clima de creciente desconfianza hacia la gestión, con un desgaste acelerado en apenas dos meses y un escenario social y económico cada vez más tenso.