El pasado miércoles 25 de octubre tuvo lugar la charla de presentación de resultados en la Universidad Católica de Córdoba (UCC) en la que participaron autoridades municipales y de la Universidad, además de docentes, estudiantes, profesionales de la salud y miembros de la comunidad científica.

El estudio abarcó un análisis sobre la circulación de bacterias resistentes en el ambiente, la portación de estas bacterias en animales de compañía, como perros y gatos, la automedicación en la población general y en estudiantes de carreras de grado del área de la salud de la UCC y el uso de antimicrobianos por parte de médicos veterinarios.

Dentro de los principales resultados presentados a nivel ambiental se evidencia que las aguas residuales provenientes de desbordes cloacales vehiculizan bacterias multirresistentes a los antibióticos, sobre todo Enterobacterales coliformes productoras de Betalactamasas de Espectro Extendido (E-BLEE) y Carbapenemasas.

A su paso por la ciudad de Córdoba, se detectan en el Río Suquía E-BLEE y carbapenemasas, Enterococcus faecium resistentes a vancomicina y Staphylococcus aureus meticilino resistentes. Cabe destacar la ausencia de microorganismos resistentes antes que el río comience a atravesar la metrópolis, poniendo en evidencia cómo el accionar de los seres humanos contamina el ambiente.

El contexto genético de KPC y NDM de las cepas aisladas fue idéntico al reportado en cepas clínicas de Klebsiella pneumoniae, sugiriendo la adquisición horizontal de carbapenemasas de origen clínico, tanto en bacterias de aguas residuales como en comunidades microbianas naturales del río. Estos genes de resistencia, podrían actuar como reservorio y potenciar la diseminación y evolución de la resistencia a los antibióticos.

En cuanto a los animales, se destacó la prescripción empírica debida a múltiples causas, lo que puede acarrear, entre otras consecuencias, fallas terapéuticas teniendo en cuenta que circulan bacterias con resistencia a los antibióticos en los diferentes nichos ecológicos.

Además, se mostraron datos de infecciones del tracto urinario en caninos con elevada proporción de E-BLEE y Staphylococcus grupo Intermedius resistente a la meticilina. Identificándose en Córdoba la primera cepa de K. pneumoniae portadora de carbapenemasa tipo KPC.

Estos datos resaltan la necesidad de establecer equipos interdisciplinarios de vigilancia para el control de la resistencia a los antimicrobianos.

Un tema a destacar respecto del consumo de antibióticos en la comunidad es el resultado de las encuestas que mostraron un alto porcentaje (64%) de automedicación, especialmente frente a síndromes respiratorios, febriles y urinarios. Se subrayó que es fácil o muy fácil adquirir el medicamento sin prescripción médica; que se abandona el tratamiento cuando los síntomas desaparecen; y que falta información y conocimientos sobre qué se debe hacer con las dosis sobrantes.

Todo lo expuesto, pone en evidencia la poca percepción del problema de la resistencia, y señala la necesidad formular intervenciones educativas que concienticen sobre la implicancia del mal uso de antimicrobianos, establecer medidas que regulen la automedicación y concientizar a los farmacéuticos para que no recomienden ni dispensen estos medicamentos sin prescripción médica.

El problema de la resistencia a los antimicrobianos, requiere medidas intersectoriales urgentes, para prevenir o minimizar la presión selectiva debida al mal uso de estos medicamentos, y evitar que infecciones actualmente tratables vuelvan a resultar complejas o mortales.