La enseñanza de matemáticas en el nivel secundario atraviesa una crisis silenciosa. Un estudio del Centro de Investigaciones Sociales (CIS) de UADE señala que las dificultades de los estudiantes en esta materia no solo responden a su complejidad, sino también a la falta de herramientas prácticas y a la escasa relación entre los contenidos académicos y la vida cotidiana. De hecho, seis de cada diez familias consultadas consideran que los temas enseñados en la escuela secundaria carecen de una aplicación real, lo que acentúa la desconexión entre teoría y práctica.
El informe también destaca que muchos estudiantes no reconocen abiertamente sus dificultades en esta disciplina, lo que dificulta la búsqueda de soluciones. Más de la mitad de los padres encuestados en la Costa Atlántica afirman que sus hijos rara vez o nunca mencionan problemas con las matemáticas, lo que podría estar limitando la implementación de estrategias de apoyo efectivas. A esta situación se suma la desigualdad en el acceso a recursos complementarios: aunque el 65% de las familias dispone de herramientas de refuerzo, un 11% carece completamente de ellas.
A pesar de este panorama, el estudio identifica un fuerte consenso sobre la importancia de mejorar la enseñanza de matemáticas. Nueve de cada diez padres consideran que una base sólida en esta materia es clave para el futuro de sus hijos y estarían dispuestos a participar en iniciativas comunitarias que favorezcan su aprendizaje. Esta demanda abre la puerta a estrategias innovadoras, como talleres aplicados, plataformas digitales y metodologías pedagógicas que vinculen los contenidos matemáticos con situaciones reales.
Con datos concretos y una necesidad de transformación evidente, el informe de UADE refuerza la urgencia de actualizar la enseñanza de matemáticas en secundaria. La oportunidad de cambio está presente y representa un desafío clave para el futuro de la educación.
- Accedé al informe completo: UADE - El aprendizaje de matemáticas en secundaria