El lunes 30 de septiembre, se llevó a cabo el evento virtual “Vida y trabajo en tiempos de IA: ¿Por qué todo cambió en los últimos 12 meses?” de la Universidad Torcuato Di Tella, en el marco de la séptima edición de la Conferencia Anual de CEPE. Contó con la presencia de los expositores David H. Autor - profesor de economía en el Instituto de Tecnología de Massachusetts; Eduardo Levy Yeyati - docente plenario de la Escuela de Gobierno (UTDT) e investigador principal del CONICET; Darío Judzik - Decano Ejecutivo de la Escuela de Gobierno (UTDT), junto a Soledad Guilera - Directora del Programa de IA y Políticas Públicas (CEPE Di Tella) quien fue moderadora del evento.
La esfera laboral revela tensiones y preguntas respecto a los impactos de la IA. Desde hace algunos años se habla de automatización y sustitución en diversas áreas como educación, arte, ingenierías e incluso judiciales. En relación a este tema, Yeyati y Judzik - coautores del libro “Automatizados” - mencionaron que habrá menos trabajo por los nuevos modelos de lenguaje, ya que sustituyen a los ‘calificados’, es decir habrá menos demanda de horas de trabajo remuneradas. Y esto puede impactar en la distribución de ingresos en los hogares provocando así una depresión en la economía.
Por otro lado, frente a un mercado global competitivo las habilidades o especializaciones adquiridas de cada trabajador puede ser un punto de partida para hacerle frente a la automatización. Según Judzik, la producción de bienes y servicios requiere que las tareas estén bien hechas, como es en el caso de las traducciones - “La IA te puede ayudar con la estricta traducción de un texto, pero necesitas un traductor que lidie, que negocie con un cliente, en el contexto adecuado, que chequee que no haya páginas repetidas o faltantes, inclusive que le ponga un touch de emocionalidad de perfeccionismo humano a la tarea que se está realizando” - mencionó Judzik.
En relación al punto anterior, David H. Autor mencionó que en los países más ricos del mundo la porción de la mano de obra es la más alta, por ejemplo, en EEUU es 60%, 54% es el promedio mundial, en el Sudeste Asiático un 52%. y en el norte de África un 43% - “En la humanidad, a medida que hemos desarrollado nuevas tecnologías, hay partes del mundo donde la mano de obra es más valiosa por la especialización. Es decir, la especialización tiene un valor de mercado” - argumentó Autor.
* Nota realizada por Daniela Palazzo en el marco de las Prácticas Preprofesionales de la Licenciatura en Periodismo de la UNDAV.